Río Sumpul: bañado con sangre en 1980

Hola a todos. Ayer tuvimos la grandiosa experiencia de ir al Río Sumpul, en Chalatenango. WWuuaoo ¡Qué camino! Fuimos todos los estudiantes que cursamos la materia Periodismo I y lastimosamente, (jajaj pajas) perdimos todas las clases de ese día. Más que el día de ayer teníamos las cuatro materias seguidas y no fuimos a ninguna por ir allí.

Bueno lo que les quiero contar es que hace 28 años, el día 14 de marzo de 1980, ocurrió una masacre en el Sumpul, donde murieron muchas personas más que todo mujeres, ancianas y niños. Lo que me da mucha tristeza y me enfada es que estas personas no pertenecian a ningún mando: ni a la guerrilla ni a la militancia y los mataron solo por matarlos. Los Contingentes del Destacamento Militar N° 1, de la Guardia Nacional y de la paramilitar Organización Democrática Nacional (ORDEN), asesinaron a un número no inferior a 300 personas que intentaban cruzar el río Sumpul, a lado del caserío de Las Aradas, departamento de Chalatenango.

Ayer fui a conmemorar este hecho, específicamente donde ametrallaron, torturaron y violaron a todas estas personas. En primer lugar, tuvimos que bajar y subir como dos cerros. Solo eran veredas con muchas piedras. Mis compañeros y yo estabamos muy ansiosos por llegar hasta el final, pero sentíamos que nunca llegabamos hasta el Río. Nos tardamos 1 hora y media para llegar abajo y como cuatro horas para subir al bus de nuevo. Me impactó ver la cantidad de gente reunida en ese lugar. Yo pude notar que algunas personas asistieron al evento con toda sinceridad, ya sea por recordar a sus seres; y otras, por apoyar a todas las familias y recordar a toda esa gente inocente que mataron.

Sin embargo, siempre hay pelos en la sopa. En plena misa dos bolitos se dieron duro y otros andaban viendo qué robaban. Es una pena que las personas no reconozcamos el significado de estos eventos pues son en honor a personas inocentes que perdieron la vida en una guerra que no ayudó en nada.

La verdad es que me puse a pensar en las condiciones en que corria la gente para salvar sus vidas, en ese terreno pedregoso que hay. El saber que mucha gente caminó, gritó, corrió y cayó por donde camine, me causó escalofríos y me dio mucha cólera porque nadie pudo hacer nada por ello.

Me parece que el gobierno en conjunto con todos sus aliados no les gusta recordar este tipo de masacres. ¡Qué país más injusto el que tenemos? Ni en los Centros Escolares se quieren tocar estos tema. Los profesores no enseñan esto, ni en libros de lectura emitidos por el gobierno se toca pues no quieren abrir la herida que nunca fue cerrada.

Con esta experiencia he valorado mucho más mi vida, mi familia, mis amigos y la memoria histórica del país. EStoy segura que me han servido las clases de Roxana, en el sentido de darme cuenta de la realidad que vivo y sus consecuencias. Cubías decía la vez pasada que después de esa masacre, ese lugar nunca jamás fue habitado. Fue olvidado. Y me parece injusto eso, pues para mucha gente esto nunca se va a olvidar. Es parte de su vida. Es recordar la sangre derramada en ese río y que nunca nadie ha hecho nada por atrapar a los asesinos.

Me parece importante que estos actos como la misa y con solo el hecho que mucha gente todavía va a este lugar, se sigan haciendo año tras año para que nunca se vaya a olvidar. Yo anduve preguntándole a la gente sobre qué pensaba sobre la frase "Perdon y olvido" y toda la gente me respondía que la masacre del SUmpul se puede perdonar, con mucho esfuerzo y poniendo cada uno de su parte. SIn embargo, nunca pero nunca se puede olvidar, porque eso ha marcado muchas vidas hasta el día de hoy. Los sobrevivientes, los niños, los jóvenes, los ancianos, los adultos y todas las personas que quieran nunca vamos a olvidar tantas masacres y violaciones a los derechos humanos de cada ciudadano que vivió la guerra.